Descripción
Origen y extracción del Aceite Esencial de Lavanda
La Lavanda (Lavandula angustifolia o Lavandula officinalis) es una planta perenne nativa del sur de Europa, especialmente en las zonas costeras del Mediterráneo. Su nombre proviene del latín “lavare”, que significa lavar y purificar. El aceite esencial de Lavanda es uno de los más buscados por sus propiedades y aroma.
El aceite de lavanda se obtiene mediante el método de destilación al vapor de sus brotes florales frescos. Este proceso, que requiere 250 kg de flores frescas para producir 1 kg de aceite esencial, resulta en un líquido amarillo pálido con un aroma dulce y floral.
Propiedades y componentes
Con más de 100 componentes químicos, el aceite esencial de lavanda destaca por su versatilidad en aplicaciones cosméticas y aromaterapia. Entre los componentes más relevantes se encuentran el acetato de linalio, linalol, lavandulilo, cineol y limoneno.
Destacado: Su capacidad para restaurar el equilibrio emocional y sus beneficios en tratamientos de aromaterapia.
Usos y aplicaciones del Aceite Esencial de Lavanda
Aromaterapia
Con un aroma floral y fresco, el aceite esencial de lavanda actúa como sedante, aliviando nerviosismo, angustia, depresión e insomnio. También se revela como un excelente repelente de insectos y desinfectante de picaduras.
Beneficios para la Piel
En aplicaciones cosméticas, este aceite regenerante es ideal para pieles sensibles, dermatitis, arrugas y estrías. Su acción cicatrizante y equilibrante lo convierte en un aliado para pieles grasas y delicadas, incluso en el cuidado infantil.
Caja destacada: Aceite esencial de lavanda, tu aliado natural para el cuidado de la piel y bienestar emocional. 100% natural y seguro para niños mayores de 2 años.
Propiedades Psico-emocionales
- Regulador del sistema nervioso, relaja y tranquiliza.
- Sedante y antidepresivo, mejora estados de ansiedad y depresión.
- Purificante psíquica y físicamente, aporta equilibrio y armonía.
- Mejora la función cognitiva y la memoria.
Propiedades para el cuidado de la piel
- Gran calmante, ideal para pieles sensibles.
- Potente regenerador, antiinflamatorio y cicatrizante.
- Alivia problemas de acné, eccemas y quemaduras.
- Calma picaduras de insectos y repele piojos.
- Alivia el dolor menstrual y reduce sofocos en la menopausia.
Descubre el poder de los aceites esenciales de lavanda. ¡Conviértelo en tu aliado natural para el bienestar de tu piel y equilibrio emocional!
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